El aumento de la demanda de torres de Internet en zonas rurales debido al trabajo a distancia, el aprendizaje y el crecimiento de la población ha provocado la congestión de las torres y situaciones de ’stop sell’. Esto dificulta el trabajo, la educación y la conectividad. En un principio, durante el bloqueo de Covid-19 se modernizaron 70 torres rurales para aliviar la congestión, y posteriormente se destinaron $90 millones de euros a la modernización de la capacidad. Estas incluyen varias tecnologías como fibra hasta el hogar, VDSL/cobre, banda ancha móvil 4G/5G y banda ancha inalámbrica fija para atender las necesidades de las distintas zonas.